Vas por la Nacional VI, dirección Coruña-Madrid, pasas Toral de los Vados, y poco después te encuentras una rotonda, en ella, si el día está diafano, con nubecitas de esas blancas, te da la sensación de encontrarte, de golpe, en un moderno y extraño far west. Extrañamente no te percatas de las escasas viviendas que están a tu derecha. Lo que llama tu atención son un letrero algo alejado que dice "club" en grande, sobre una edificación de un llamativo color naranja, y otro, más proximo, con su corazón rojo sobre el cartel que te llama, cual saloon de Kansas City, solo que este saloon se llama "El Corazón del Bierzo", todo ello en un polvoriento cruce de caminos berciano.