Yo no soy partidario, ni mucho menos, de poner a los abuelos sentados en un sofá con la excusa de "no hagas nada que te puedes estropear". Mientras los abuelos puedan, y ojalá sea por muchos años que hagan las actividades que les plazcan, si quieren hacer taichí en las plazas públicas me alegraré por ello, y si quieren montar en moto me parecerá fenomenal siempre que conserven las habilidades necesarias para hacerlo.
Lo que me choca es la incoherencia de nuestros gobernantes, de la administración en general, que no paran de reprimir siempre que pueden todo lo que es el mundo del motociclismo, eso si, amparándose en la excusa de la seguridad vial y en la reducción de la siniestralidad, no vaya a ser que pensemos que lo hacen por recaudar o por cualquier cosa peor.
Y de repente va y me sorprende esta publicidad en el periódico Faro de Vigo, publicidad que como se puede ver (podeis ampliar la imagen picando en la foto) está amparada por diversos organismos estatales y por la Xunta de Galicia y promueve algo muy loable: que los abuelos no se queden en el sofá, que sean activos. En la foto como veis aparece un abuelo conduciendo su moto, con sidecar eso si, la moto parece una Ural, quizás alguna clásica, en el periódico también tiene borrosa el logotipo de la marca, no es que yo haya tomado mal la fotografía.
Y bien está sugerirles a nuestros abuelos que el sofá no debe de convertirse en su enemigo, pero de ahí a animarlos a rodar en moto la cosa varía un poco, más aún cuando muchos sabemos que aunque queramos puede que a cierta edad tengamos que dejar la moto un poco de lado, es ley de vida. Y es que digo yo, lo de andar en moto requiere cierta habilidad que suele adquirirse con algo de tiempo, práctica y prudencia, y no se yo si es muy normal decirles, aunque sea subliminalmente a los abuelos, que se compren una moto, que mola mogollón y a rodar ¿os imaginais al jubilado de turno, que nunca condujo una moto, sacándose el carnet y comprándose su flamante motocicleta unos días después de tenerlo? ¿no aumentaría eso considerablemente el riesgo de que sufra un accidente? Quizás yo estoy equivocado, y vosotros teneis como siempre la palabra para corregirme, pero me da que no lo estoy, al menos no demasiado.
En todo caso me importa rábano y medio si un abuelo decide a los setenta que llegó el momento de soltarse la melena y comprarse una moto o diez, lo que me llama la atención no es eso, lo que me llama la atención es la incoherencia de la administración que parece, en el anuncio, más que evidente ¿no habría diez o cien ejemplos mejores para representar a un abuelo activo?
Lo digo también porque los abuelos, estoy seguro, ganaron mucha sensatez con el paso del tiempo, y no se van a volver locos por ver este anuncio y marchar en fila a los concesionarios a comprarse motos, el problema es que quizás este tipo de anuncio no incite a la mayoría de ellos a abandonar el sedentarismo "¿en moto yo a mis años y con esta artrosis que no se me va y el reuma que me martiriza?" pensará más de uno, pero si pones la foto de un abuelo paseando por alguna montaña, haciendo senderismo vaya, o algún otro tipo de actividad deportiva que no requiera de mucho esfuerzo, habilidades perdidas por desgracia hace años, y que resulten placenteras y gratificantes en lugar de arriesgadas, quizás sean más los que piensen que efectivamente el sofá puede ser un terrible enemigo.
Y si tenemos en cuenta lo dicho en el anterior párrafo... ¿no os parece un dinerillo muy mal gastado en una publicidad un tanto inútil?

Tu, como atrapador de instantes, sabes de la importancia de una imagen, aquello que se decía de que una vale mas que mil palabras, el publicista que ha hecho la campaña ha debido buscar eso, el impacto, y el político que ha aprobado la campaña debería haber sido quien valorase que éste -el impacto- podría ser mas negativo que positivo, lo que seguramente ha ocurrido es que el publicista se ha llevado una pasta y no ha pensado en las consecuencias de su imagen y el político se habrá colocado el medallón del "miraquebienlohehecho" y dado salida a sus presupuestos, lo demás ni le importa ni le afecta. En conclusión: no metas a un cateto a diseñar cohetes espaciales. Un abrazo y un artículo genial como todos los tuyos.
ResponderEliminarMe gustó eso de no meter a un cateto a diseñar cohetes espaciales. Ciertamente a los políticos se les debería de pedir cierto nivel de formación.
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